El frío me inmoviliza, me adormece.
Entonces leer se hace difícil, y hablar más todavía.
Las imágenes cambian poco, los días pasan delante de mis ojos.
Es tiempo de agarrar el invierno por más frío que esté, y apretarlo fuerte para poder dejarlo ir.
miércoles, 25 de julio de 2012
Suscribirse a:
Entradas (Atom)